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Qué es el crédito rotativo y cómo manejarlo sin endeudarte


Qué es el crédito rotativo y cómo manejarlo sin endeudarte

Definición de Crédito Rotativo

El crédito rotativo es un tipo de crédito flexible que permite a los usuarios tomar prestada una cantidad de dinero según sea necesario, hasta un cierto límite. Es diferente del crédito a plazos, que proporciona una suma global y requiere pagos de amortización regulares. Un ejemplo común de crédito rotativo es una tarjeta de crédito.

Cómo Funciona el Crédito Rotativo

Cuando se aprueba una línea de crédito rotativo, el prestamista asigna un límite de crédito. Este límite representa la cantidad máxima que el prestatario puede tomar prestada en cualquier momento. Al igual que con las tarjetas de crédito, el prestatario puede realizar compras o retiros en efectivo hasta que el saldo de crédito alcance su límite.

El crédito rotativo se ‘renueva’ a medida que el prestatario realiza pagos hacia su saldo deudor. Es decir, una vez que se paga una parte o la totalidad del saldo deudor, esa cantidad se vuelve a poner a disposición del prestatario para su uso.

Pros y Contras del Crédito Rotativo

Pros

El crédito rotativo puede ofrecer una gran flexibilidad para los prestatarios. En lugar de tener que solicitar un nuevo préstamo cada vez que necesite dinero, un prestatario puede simplemente usar su línea de crédito rotativa según sea necesario. Además, los intereses solo se cobran sobre el saldo pendiente, no sobre el límite de crédito total.

Contras

Sin embargo, esta flexibilidad puede convertirse en una desventaja si no se maneja bien. Algunos prestatarios pueden sentirse tentados a gastar más de lo que pueden permitirse pagar, lo que resulta en un alto nivel de deuda. Además, las tasas de interés de los créditos rotativos suelen ser más altas que las de los préstamos a plazos.

Cómo Manejar el Crédito Rotativo sin Endeudarte

Manejar el crédito rotativo de manera efectiva requiere disciplina y una buena comprensión de tus propias finanzas. Aquí hay algunos consejos para hacerlo:

  1. Establece un presupuesto: Conoce cuánto puedes permitirte gastar cada mes y cíñete a ese monto.
  2. Paga el saldo completo cada mes: Esto evitará que se acumulen intereses.
  3. Evita retirar efectivo: Las retiradas de efectivo a menudo implican tasas de interés más altas que las compras regulares.
  4. Usa menos del 30% de tu límite de crédito: Mantener un uso bajo de tu crédito puede ayudarte a mantener una buena puntuación crediticia.

Al seguir estos consejos, puedes aprovechar los beneficios del crédito rotativo sin caer en la trampa de la deuda.

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